Con una radio abierta y la participación de dirigentes del Cispren, los empleados de la radio FM Shadow (102.9 khz) repudiaron el allanamiento de la emisora realizado el jueves 6 de septiembre por efectivos de la Policía Federal por orden de la jueza Cristina Garzón de Lascano.
Resultó sugestivo que el allanamiento, ordenado tras una denuncia ante la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), se produjera en un momento particularmente crítico para las instituciones democráticas de la provincia de Córdoba, luego de las sospechadas elecciones del 2 de septiembre, durante las cuales FM Shadow mantuvo una línea editorial independiente de los poderes políticos de turno y luego de sufrir la discriminación en la asignación de la pauta publicitaria oficial y presiones y amenazas en reiteradas oportunidades.
En un comunicado, el Cispren afirma que el procedimiento contra la radio, que lleva 16 años ininterrumpidos en el aire, “atenta contra la expresión libre de un medio de comunicación local y se enmarca en los dictados de la Ley de Radiodifusión engendrada por la dictadura militar para favorecer la concentración monopólica de la comunicación y coartar las expresiones plurales y democráticas”.
Por otra parte, el Cispren, exhortó a la comunidad “a mantenerse alerta por la irrestricta vigencia de la voluntad y la expresión democráticas y reclama la devolución de los equipos confiscados a FM Shadow, permitiendo que nuevamente salga al aire”
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